sábado, 7 de noviembre de 2015

Crónicas Nonduermeñas, Octubre 2015


AÑO VI Nº 70 Pedro Simón: Cronista de Nonduermas Oct. 2015
Nonduermas: latitud 37· 58’ 16’’ N; longitud 1· 10’ 15’’ O. Altitud 50m. Demografía: 2378 hab



El Rosario de la Aurora 2015

Como es tradicional en todos los rincones de la huerta murciana, el primer domingo de octubre, cuando el lucero del alba está en su apogeo, la campanilla anuncia por los caminos el rezo del santo rosario. Así, los vecinos de Nonduermas, promovidos por la Peña ‘El Pimiento’ y el párroco a la cabeza, lo hicieron el 4 de octubre.

Copyringt@Pedro Simón Muñoz 2010, R. P. I. nº 08/2010/157
Tirada: 200 ejemplares



El sonido del rosario llenó la pedanía

Con farolillos y al son de la campanilla, en el silencio de la noche, sólo se oye el son acompasado de las pisadas y el soniquete del Ave María, que las almas madrugadoras entonan para saludar el alba.
Es un rezo pegadizo que nos hace recordar, cuando los caminos no estaban asfaltados y las acequias entubadas; cuando éramos rodrejos y nuestras abuelas nos llevaban de la mano, a saludar el día con el rezo de la oración mariana.
El tiempo empieza a refrescar y ya se ven los primeros abrigos. Acompañando al rezo, la brisa matutina te refresca la cara, y de lo profundo de ti, sale un aliento de paz que te hace sonreír a la mañana.
Entre Ave María y Ave María, hay un momento de meditación y evocación, que es alimento espiritual. Recuerdas cuando, de niño, correteabas entre el cortejo procesional, que desgranaba, con esos dedos que te acariciaban, las cuentas del Rosario.
El Rosario de la Aurora está muy metido en las venas del huertano y la huertana. Y no es fácil que se borre de las mismas. Todos los años se renueva, porque siempre habrá un grupo que lo promueva.
Con el rezo del último Misterio se apagan las estrellas rezagadas, clarea la mañana y el trino de los pájaros acompañan al gloria que finiquita el rosario. Se celebra la Eucaristía y se toma un chocolate con monas. Saliendo con energías para hacer frente a la dura jornada. 


La Peña ‘El Pimiento’ transmite sus tradiciones

En toda la vega murciana, las peñas son las encargadas de recordar las sanas costumbres de nuestros mayores que nos precedieron. Ellas son las guardianas del arcano del acervo cultural añejo. Y se esmeran por transmitir aquello que nuestras abuelas y abuelos vivieron.
Durante el mes de octubre, la Peña ‘El Pimiento’, ha promovido un taller de bordado. Y nuestras féminas, con la belleza y gracia que las identifica, se han esmerado en plasmar, con su salero natural, las filigranas que son capaces de hacer con la aguja y el dedal.
Estos trabajos adornarán su ajuar. O, los lucirán en las fiestas de primavera con sus refajos y trajes de huertana.
En la foto se ve una muestra de lo dicho. Ya no se usa el huso y la rueca. Y los utensilios costureros están desapareciendo. Pero aún sigue estando sobre la mesa el ovillo de hilo, la aguja, el dedal y las tijeras.
Y nuestras madres e hijas se sientan en corro, alrededor de la mesa costurera, se cuentan sus cuitas y se ríen, al mismo tiempo que se esmeran en su labor.
Nuestra Peña ‘El Pimiento’ es la encargada, en nuestro terruño, de hacer aflorar viejos uso y costumbres, que de otra manera desaparecerían. Perdiéndose con ello un bagaje cultural de suma importancia, porque son elementos irrecuperables.
Un aplauso y viva de animación y agradecimiento a nuestra Peña. 

-----------------------------------------------------------

Noticias de Interés
Fallecimientos:

El día 12: Juan Hernández Costa

El día 23: Antonio Barceló López

-----------------------------------------------------------







El Centro de Mayores viaja a Cieza





El 4 de octubre, los mayores del Club Social de Nonduermas, hicieron un Viaje Cultural a Cieza. En la foto se refleja la llegada a esta magnífica ciudad, bastión morisco, arropada con el flumen Thader, nuestro río Segura, con el ánimo de pasarlo bien, disfrutar del día, que fue magnífico, y llenarse el espíritu de conocimientos históricos, que son la savia de nuestra cultura.

A la llegada, un guía se hizo cargo de la expedición y nos llevó por los lugares más emblemáticos: nos enseñó y explicó el escudo y emblema “Por cruzar el puente nos dieron la muerte”; la ermita de San Bartolomé, donde está la Muda haciendo guardia en la puerta, cuya leyenda nos narró; el Balcón del Muro, la Plaza Mayor y el convento de las Clarisas.

Desde el lugar donde se encuentra el emblema de la ciudad, se divisa una magnífica panorámica. Y allí nos detuvimos para disfrutar del momento y hacer un alto en el camino.

Quedamos admirados de la ermita de San Bartolomé. Recinto pequeño, pero muy acogedor, donde se guardan los gigantes y cabezudos de los acontecimientos festeros.


Nuestros Mayores se divierten en Cieza


En las fotos, unas cuantas de nuestras féminas posando con la Muda, en la puerta de la ermita de San Bartolomé.
Cuenta la leyenda que era muda de nacimiento. Que estando el pueblo dentro de la ermita y ella en la puerta, vio venir a las huestes moriscas al otro lado del puente y entro gritando a la ermita:”¡Que vienen los moros, que vienen los moros!”. Y los ciezanos, que estaban dentro, pudieron salir y defenderse. La historia no termina bien, pues fueron masacrados. Pero el pueblo vio en la Muda un milagro palpable. Y, ahí está. En su estatua de bronce.
En la otra foto, las mujeres disfrutan con las filigranas de esparto en el recinto del Museo.
Hecho el recorrido por los lugares emblemáticos ciezanos, la expedición partió para Calasparra a comer en el Salón Albero, con un completísimo y abundante menú, donde se degustó gamba roja a la plancha. Y a gogó. Todo ello escanciado con buen vino jumillano, refrescos y cerveza.
Después de la opípara comida y de reposarla en la sobremesa, las damas se echaron un baile en el salón adyacente, para rebajar las gambas y la carrillera con guarnición.
A continuación se hizo la visita obligada al Santuario de la Esperanza que, por muchas veces visto, nunca cansa. Es una gozada el paisaje que se divisa desde el mismo. El murmullo del Río Segura que pasa a sus pies. Los majestuosos pinos, pinsapos y olmos que, con sus copas, quieren tocar el cielo. De vez en cuando, también se ve alguna ardilla corretear entre su ramaje.
Tras un tiempo prudencial de paseo por el Santuario. Y hecha la visita reglamentaria a la Virgen de la Esperanza. Y dejando constancia de que Nonduermas ha estado allí, los expedicionarios se aprestan a retornar.
Todos gozaron con el viaje y estuvieron dispuestos a repetir. Juan Pujante, el presidente, ya está dándole vueltas al magín para planificar otro. 


Procesión de Ntra. Sra. del Rosario, Era Alta

El domingo 11, la Virgen del Rosario, Patrona de Era Alta, visitó su patronazgo a hombros de sus hijos eralteños. Todos los acontecimientos religiosos de Era Alta tienen cierta vinculación histórica con Nonduermas.
Hubo un momento en la historia que Nonduermas estaba vinculada con Era Alta. En la hemeroteca, y en ´EL POSTILLÓN`, de Manuel Muñoz, reza lo siguiente: 1721 Separación de Nonduermas y Era Alta: En la ciudad de Murcia en veinte días del mes de enero de mil setecientos veinte y uno, el Señor Dn Bizente Correa y Salamanca, Cavallero del horden de Alcantara, Correxidor de esta Ciudad, habiendo visto lo resuelto por ella en el Cavildo de siete del corriente nombrando Diputados separados en los partidos de Era Alta y Nonduermas, calles de esta Ziudad, que esta aquí habían estado suxetos ambos venzidarios a la Diputacion de Nonduermas, en que Su Señoria suspendió el conformarse, por los motivos que consta de dho Cavildo, y desde luego, en fuerza de los Reales Privilexios desta Ciudad con que a sido requerido, se conforma con lo resuelto por ella por dho Aiuntamiento, y asi se le participe en el primero que se celebrase para que coste. Y lo firmo: Dn Vicente Correa Salamanca”. (sic).
De hecho, se han celebrado algunas procesiones, en los arcanos de la historia, de forma conjunta.

La Virgen por las calles eralteñas



En el silencio de la noche, el retumbar de la banda de Cornetas y Tambores de Era Alta hace vibrar hasta las farolas, a su paso por las calles eralteñas, precedida de la Virgen del Rosario llevada con orgullo a hombro de sus hijos.
Y no le faltaron los pétalos de rosas que le echaron desde un balcón. Estos pétalos cubrieron su esbelta figura adornando, aun más, su manto regio, siendo una muestra de la devoción que la pedanía de Era Alta siente por ella.
Dada la cercanía de las pedanías de Nonduermas y Era Alta, sus parroquianos se intercambian y en cualquier acontecimiento religioso de ambas ves sus devotos acompañando, majestuosamente, los pasos procesionales.
Como en todas las procesiones, las calles se llenan de feligreses para  ver pasar su imagen favorita y rendirle, devotamente, una plegaria de amor. El corazón se enardece y quiere salir de su coraza torácica para acompañar al santo de su devoción.
En la procesión de la Virgen del Rosario, solo sale ésta, con toda solemnidad, a hombros de sus portadores orgullosos, y acompañada por sus Camareros: Salvador Sandoval y Teresa Teruel, su esposa que, a su paso por su casa, le echó una nube de pétalos de rosas desde su balcón. También fue acompañada por las autoridades pertinentes: el alcalde de la pedanía y el concejal del Ayuntamiento de Murcia, Eduardo Martínez Oliva. Y presidida por el recién estrenado párroco, Pedro Andrés Sima.
La devoción mariana a la Virgen del Rosario en Era Alta se pierde en el arcano de la historia. La primera mención de la misma, según las hemerotecas, data de 1796. Pero esta misma da a entender que sus raíces son muy anteriores.
Primero se la conoció con la denominación de Virgen del Rosario de la Arrixaca. Y, con el tiempo, cambió su nombre por el actual. Y así fue nombrada Patrona de la pedanía. Con vivas a la Virgen, volvió a su casa, la Iglesia, esperando que el próximo año se repita el mismo acontecimiento. 











No hay comentarios:

Publicar un comentario